Las leyes que regulan la protección de datos se basan en la premisa de que todos los datos personales de los usuarios deben ser protegidos por los legisladores europeos. Además, se considera “dato personal” a todo dato informativo capaz de hacer identificada o identificable a una persona física.
La Ley Orgánica de Protección de Datos, OBLIGA a todas las empresas y autónomos tengan o no empleados, que tratan datos de carácter personal, a través de medios informáticos o en soporte papel, tales como sus ficheros de clientes, proveedores, trabajadores, etc.
El DPO es la persona encargada informar a la entidad responsable o al encargado del tratamiento sobre sus obligaciones legales en materia de protección de datos.
¿Qué tipo de datos existen?
- De tu identidad: nombre, origen étnico y racial, lengua materna, domicilio, teléfono, correo electrónico, firma, contraseñas, RFC, CURP, fecha de nacimiento, edad, nacionalidad, estado civil…
- De tu trabajo: institución o empresa donde trabajas, cargo, domicilio, correo electrónico institucional o empresarial, teléfono del trabajo…
- De tu patrimonio: sueldo o salario, impuestos, cualquier tipo de crédito, tarjetas de débito, cheques, inversiones…
- De tu educación: escuelas, calificaciones, títulos, cédulas, certificados, diplomas…
- De tu ideología: religión, afiliación o preferencia política, sindical, participación en organizaciones civiles…
- De tu salud: estado de salud, historial y estudios clínicos, enfermedades, tratamientos médicos, medicamentos, alergias, embarazos, condición psicológica y/o psiquiátrica…
- De tus características físicas: tipo de sangre, ADN, huella digital, registro de voz, imagen, registro dental, color de piel, iris, cabello, lunares, cicatrices y otras señas particulares…
- De tu intimidad: referencias y hábitos sexuales, entre otros.